Lionel Messi, nuevo jugador del PSG, apenas acaba de ser presentado y ya todo el mundo se está preguntado cuándo va a debutar con el conjunto parisino.

Sin embargo, hay varias aspectos a tomar en cuenta, el argentino tiene que volver a entrenar, nada menos que por primera vez en su nuevo club y un mes después de la final de la Copa América, el 10 de julio anterior, cuando jugó por última vez.

Tome nota. El PSG jugará este sábado, a la 1 de la tarde, hora tica contra el Racing, por la segunda fecha de la Liga 1.

El PSG juega el sábado en el Parque de los Príncipes ante Racing de Estrasburgo, a la 1 de la tarde, hora tica.

El juego será una fiesta en todas las dimensiones posibles porque ese día regresa el público a las gradas desde que empezó la pandemia y también será la presentación de la Pulga en el estadio.

¿Jugará aunque sea un minutico? Aunque parezca precipitado imaginarlo, no hay que descartarlo.

De no debutar, entonces deberá esperar otro mes para que el equipo vuelva a ser local: en el medio PSG tiene dos partidos fuera de París y luego se inicia la fecha FIFA, en la que Messi viajará a Sudamérica para jugar tres partidos con la selección argentina (Venezuela, Brasil y Bolivia) por las eliminatorias.

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Calendario apretado

Luego de este sábado, el PSG regresará a su estadio hasta el 12 de setiembre, cuando enfrente a Clermont por la Liga 1. ¿Será posible que la euforia mundial aguantar tanto para ver a Messi lucir la 30?

Como sea, el objetivo de fondo del club --que ayer mismo empezó a recaudar por la venta de la camiseta de Messi-- es la Champions (la etapa de grupos comenzará el 14 de setiembre), el gran título que le falta.

Messi también la necesita. Allí está puesta la mira y en eso coinciden los que acaban de encontrarse: el argentino no gana ese título desde el 2015, pero su ilusión renace ahora al incorporarse a un equipo competitivo en serio, algo que ya no le ofrecía Barcelona. Eso y el Mundial de Catar, para el que falta un año y medio, mueven los últimos deseos de su ambición deportiva.

Nada mal para alguien que, de pronto, se encontró con la hoja en blanco cuando creía que ya no habría espacios para sorpresas ni emociones desconocidas.

Como llegar a una nueva ciudad, representar a un nuevo club, escuchar una nueva lengua… Y elegir ese número, el hilo que lo transporta a aquellas ilusiones adolescentes que ahora reaparecen en su cuerpo.