El Deportivo Saprissa presentó detalles de lo que será su centro de entrenamiento, el cual se llamará Centro Deportivo Roberto “Beto” Fernández, tal y como lo adelantó recientemente La Teja.

La primera etapa se inaugurará en agosto y tendrá dos canchas, una natural y una sintética, así como un área de camerinos.

“Era una gran deuda con los jugadores del futuro, me llena de alegría lo que nos pueda dar esta infraestructura.

“La creación de nuestro centro deportivo es parte fundamental del plan estratégico que nos hemos planteado, porque aquí optimizaremos el talento integral de nuestros atletas y potenciaremos la excelencia en la gestión deportiva”, dijo el presidente del Sapri, Juan Carlos Rojas.

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En la presentación también estuvo presente el gerente morado, Ángel Catalina, quien se mostró muy emocionado con el nuevo proyecto.

“Estamos muy ilusionados de presentar el lugar donde tendrán cabida nuestros sueños. En el Centro Deportivo continuaremos construyendo la identidad de una institución que honra sus raíces, eso es fundamental e importante para nosotros.

“Desde que llegué a este club entendí rápidamente por qué este equipo es el más grande del país y en ese centro cultivaremos el ADN ganador a nuestros jóvenes para seguir llenando de gloria al Saprissa. Hoy nos llenamos de mucha ilusión hacia el futuro del Deportivo Saprissa”, comentó el español.

Soltando billete

En la primera fase del proyecto se invertirán casi $2 millones (un poco más de ¢1.366 millones) y los terrenos en donde se construye el proyecto son alquilados.

El Centro Deportivo se ubicará en Guayabos de Curridabat, en el proyecto de desarrollo inmobiliario Al Este, a 15 minutos del Ricardo Saprissa. En posteriores fases, el complejo tendrá oficinas, dormitorios y una cancha más, aunque no se especificó cuándo estarían listos.

“Me gustaría felicitar por el gran logro que consiguió la selección nacional, a don Luis Fernando Suárez y su cuerpo técnico, a todos los jugadores que han participado en la eliminatoria”. Ángel Catalina, gerente deportivo Saprissa.

“Es un proyecto llave en mano con un alquiler a largo plazo. Además de eso, son varios cientos de miles de dólares de equipamientos que el club invierte.

“Es un alquiler que refleja toda la inversión que se hace y parte de esa inversión también es nuestra y una serie de equipaciones que también son inversiones que el club debe hacer”, añadió.

Más que merecido

El nombre del complejo deportivo se decidió como una forma de honrar al fundador y primer técnico del equipo.

“Hoy es un día importante, un día que sé que el saprissismo había esperado con muchas ansias y es develar cómo será el Centro Deportivo, el cual, luego de un análisis interno sobre cuál sería el nombre del que antes llamábamos Centro de Entrenamiento Saprissa.

“El nombre de don Ricardo está en el club, en el estadio y de pronto quedó de lado esa historia tan maravillosa de don ‘Beto’ Fernández”. Juan Carlos Rojas, presidente Saprissa.

“Sentíamos que era fundamental aprovechar esta oportunidad para honrar a gente histórica, que básicamente sentó las bases para estar donde hoy estamos y quién mejor que Roberto “Beto” Fernández, quien reunió a aquel grupo de chiquillos para luego crear al Deportivo Saprissa”, agregó Rojas, al justificar la designación que se hizo para el centro.

El dirigente tibaseño explicó que esta estructura es más que un centro de entrenamiento.

“Tener este Centro Deportivo era una gran deuda de esta dirigencia para Saprissa, los jugadores y para quienes vayan a seguir con este legado.

“Es una herramienta para lograr el objetivo principal, que al primer equipo lleguen jugadores formados con los valores y el ADN de Saprissa”, comentó.

El presi agregó que en los últimos tres años, varias personas ligadas al Monstruo colaboraron para que este proyecto sea una realidad.

“En los últimos tres años participaron desde jugadores, entrenadores, gerentes deportivos, gente como ‘Porritas’ por mencionar alguno, no solo el tema deportivo, logística.

“También utileros para asegurarnos de lo que es más cómodo y lógico para negociar la funcionalidad con los proveedores que mantienen las canchas y fue un proceso que participó mucha gente para llegar al diseño final”, destacó.