Banda Chiqui Chiqui siente la “presencia” de Kuarta Pacheco en sus conciertos

“En la vida se tiene que cantar y bailar todos los días, porque no sabemos si mañana nos vamos a morir”.

Con un pensamiento como el anterior, el músico Víctor Hugo Pacheco, mejor conocido como Kuarta, disfrutó al máximo su paso por esta tierra y aunque falleció el pasado miércoles 2 de noviembre víctima de un infarto, su recuerdo permanecerá en muchos amantes de la música y en especial de sus compañeros de la banda Chiqui Chiqui.

Como el show debe de continuar, conversamos con Lelis Céspedes, excompañero y uno de los líderes de la agrupación nacional para que nos contará cómo han sido esos primeros días sin su fiel amigo y colega.

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-¿Cómo han sido esos primeros días y presentaciones ya sin Kuarta?

La ventaja que tenemos es que el público nos quiere mucho, igual, ya estábamos acostumbrados a tocar sin Kuarta porque él generalmente se iba un tiempo a Estados Unidos con Marcos (Monge) o conmigo y cuando alguno no está, el grupo sigue igual.

Un amigo nos dijo que pensáramos que él anda de viaje pero que sigue con nosotros. Por lo general, los compañeros que cantan los temas de Kuarta cuando él no estaba hasta tienen un timbre muy parecido. Entonces en los eventos que hemos tenido, en algún momento hasta sentimos que él estaba con nosotros y ha facilitado un poco más las cosas. Sí, no le puedo mentir que duele, pero intentamos disfrutar, incluso, estamos llevando al sobrino de Kuarta, que se llama Marlon Barquero, como baterista para que nos ayude.

-¿Ese vacío no lo van a poder llenar pero saben que él los acompaña desde donde esté...

Sí, él queda en nuestros corazones y la música de él va a seguir viva. Tenemos una canción que se grabó hace 18 años que describe exactamente lo que era Kuarta. Habla de que la vida es una locura y que uno no sabe si mañana se va a morir, entonces por eso hay que disfrutar y bailar todos los días.

-¿Él pensaba mucho en su muerte?

Ya él sabía lo que era morir, había tenido dos infartos y un paro, entonces él nos decía que quería morirse sentado en la batería pero casi que así fue porque el último toque lo tuvimos domingo y él murió miércoles.

-¿Ya tienen un sustituto fijo?

Ahorita está el sobrino de Kuarta, pero hay varios más, también está Freiman Villegas, Royner González, eso depende del que esté disponible. Por dicha tenemos unos cinco a diez músicos haciendo fila.

-En lo personal, ¿cómo han sido estos días para usted?

Muy duro porque él era mi compa, vivíamos cerca, nos conocíamos desde hace más de 40 años, íbamos mucho al estadio de Heredia y él me ayudaba. Más bien en los últimos días le decía que la llevara suave, pero siempre andábamos juntos haciendo mandados o en reuniones.