Farándula

Maureen Salguero sufrió accidente en Santa Cruz y terminó en el hospital

La tía había sacado vacaciones para disfrutar de los festejos

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La querida Maureen Salguero se fue a disfrutar de las Fiestas Típicas de Santa Cruz y terminó en el hospital con una pierna rota.

La Tía llegó a Guanacaste con sus dos hijas el viernes anterior porque el plan era pasar unos días en la playa y otros en las actividades de las fiestas en honor al Santo Cristo de Esquipulas.

De hecho, el sábado se fue a pegar una bailadota al concierto de Eddy Herrera y el grupo Niche y este domingo planearon ir a playa San Juanillo, para agarrar un poco de colorcito.

Al caer la tarde se fueron a un mirador en ese mismo sector para ver el atardecer y ahí fue donde ocurrió la emergencia.

“Cuando ya se acostó el sol veníamos bajando el mirador y me resbalé, o sea, yo me resbalé y el pie (izquierdo) que se fue resbalado hacia adelante, chocó con una piedra y me despedazó el tobillo y ahí quedé acostada, ya no me pude levantar”, contó la presentadora.

Mientras esperaban que llegara una ambulancia les dio la noche y se quedaron completamente a oscuras.

Lo más preocupante, según relató, es que tenían muy poca carga en el celular y temían que subiera más la marea y quedaran completamente aisladas, pues estaban a unos 350 metros de la carretera.

“Quedamos como en una especie de isla, fue como una película de terror. Como a la hora y cuarenta minutos llegó la ambulancia porque además las fiestas en Santa Cruz tenían a las unidades ocupadas y, bueno, fueron casi dos horas yo ahí con el tobillo colgando y por dicha estaba con mis hijas y mis primos, muy rodeada de amor y de cuidado, se acostaron conmigo a ver las estrellas, me pusieron música”, mencionó.

Afortunadamente, la novia de una de sus hijas andaba ibuprofeno y eso le ayudó a calmar un poco el dolor mientras esperaban a los cruzrojistas.

Esta no es la primera vez que se fractura, pues ya se había quebrado un brazo y el empeine del mismo pie hace años. Además, el año pasado también la operaron de emergencia de la vesícula.

Horas de dolor

El tormento no terminó con la llegada de los cruzrojistas, porque para llegar hasta la clínica de Santa Cruz tardaron unas dos horas y, según dijo, el camino se le hizo eterno porque el dolor iba en ascenso.

“Es muy difícil explicar el dolor de cada hueco en la calle de lastre por donde pasaba la ambulancia, a pesar de que ellos iban lo más despacio que podían para no lastimarme más. Llegamos a la clínica de Santa Cruz y hasta que, cuatro horas después (desde que se fracturó), puede recibir una primera dosis de morfina”, relató.

Luego de controlado el dolor y al no haber especialistas en ortopedia en la clínica, la llevaron en ambulancia de nuevo hasta el Hospital de Nicoya, donde le confirmaron que se quebró los dos maleolos del tobillo (bolitas interna y externa del tobillo) y que requería de operación para reconstruir toda esa parte.

Sin embargo, los doctores prefirieron que la cirugía se la hagan en el hospital Calderón Guardia para mayor comodidad.

Antes de abandonar el centro médico le tocó enfrentar un dolor todavía más fuerte, ya que le acomodaron los huesos fracturados para colocarle una férula, para que el pie fuera firme de camino a San José.

Este martes su hermana se trasladaría hasta Guanacaste en otro carro para llevarla al Calderón Guardia, porque ella necesita ir acostada en el asiento trasero y en el suyo se devolverían sus hijas y acompañantes.

“Aquí en Guanacaste he tenido la dicha que incluso me prestaron un par de muletas para poder hacer menos complicado el regreso. Me han chineado mucho, mis hijas me han cocinado, mis primos me llevaban de un lado a otro cuando no tenía muletas, por ejemplo, al baño. Esto ha sido una historia impactante, impresionante la verdad y yo creo que ha sido uno de los dolores más difíciles de describir”.

Piensa en positivo

Una de las mayores preocupaciones de la Tía era su papito, Danilo Rodríguez, de cómo fuera a reaccionar al enterarse de su accidente, por eso prefirió ocultarle todo hasta que ya le dieron la salida el lunes, para que no se preocupara tanto.

La locutora se considera una mujer valiente y de las que opta por verle el lado positivo a las cosas, por eso prefiere pensar que todo esto que le ocurrió la libró de algo mucho peor.

Lo único que la tiene medio triste es que no sabe cuándo volverá a tirarse a pista, porque bailar es una de sus principales pasiones y momentos de desestrés.

“Hay que hacerle frente a esta situación, como lo he hecho con muchas otras. Y volveré a bailar, que es uno de las cosas que más feliz me hacen”, recalcó.

De hecho, ya había planeado ir al concierto de Bronco y Calibre 50 de este sábado, ahí mismo en Santa Cruz.

“Ansiaba tanto estos días. Llevar sol, compartir tiempo con ellas (sus hijas), descansar. Esta jornada de toros fue especialmente pesada”, agregó.

Ahora solo le queda esperar a ver cuándo le programan la cirugía, cuánto tardará el proceso de recuperación y terapia para regresar con toda la pata a la cabina de La Caliente.

Silvia Núñez

Silvia Núñez

Periodista de Espectáculos y Sucesos. Bachiller en periodismo de la Universidad Central desde el 2004. Labora en el Grupo Nación desde el 2013.

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