“Él es buena persona, pero no toma decisiones y yo quiero algo más”

“Tomé la decisión de terminar con mi novio. Él es buena persona, pero no toma decisiones y yo quiero algo más. Él simplemente me dice que demos tiempo; sin embargo, han pasado los años y no suceda absolutamente nada. Yo lo quiero mucho, es buena gente, es agradable y nunca tenemos pleitos, pero no toma decisiones. Me sigue buscando y no se da cuenta que esta vez es para siempre”.

1. Creo que está en su derecho de tomar una decisión a este nivel. Cuando se está en un noviazgo y se pretende pasar a la siguiente etapa y la otra persona no toma decisiones, no enfrenta el compromiso, no da respuestas concretas, pasan los años y nunca se está listo, sé que es muy duro, pero tomar esta decisión suena razonable.

2. Hay momentos en la vida de noviazgo en que la pareja se debe preguntar: ¿cuál es el siguiente paso? Esta es necesaria y válida. Una persona puede querer mucho, pero si no toma decisiones y abre paso a la confusión y la contradicción, la otra persona simplemente tiene derecho a definir qué es lo que se quiere, cómo lo quiere y desde ahí tomar decisiones, sin contradicciones.

3. Ahora, si tomó una decisión en firme y él la sigue buscando, frente a esto usted está en su derecho de cortar la comunicación. La otra persona debe respetar sus decisiones, sobre todo cuando ha sido un proceso de años. Si él insiste en no saber qué quiere, pues me parece que todo está claro. Esto es algo que usted debe valorar y es un derecho personal para cerrar el ciclo y avanzar.

4. Cuando se ha hablado una y otra vez de lo mismo, se hicieron diferentes propuestas y planteamientos y simplemente no se lograron acuerdos que nos permitan avanzar, pues este le da fundamento a la decisión de la ruptura.

5. Una clave importante es que nuestras decisiones estén basada en los hechos para que tengan fundamento y así no sucumbir ante los cambios emocionales y la contradicción, que muchas veces es frecuente encontrar en las primeras etapas después de una ruptura.