Las elecciones que hará Nicaragua el 7 de noviembre son vistas como “falsas” por el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, que criticó al gobierno de Daniel Ortega, al que calificó como “una de las peores dictaduras del mundo”.
De acuerdo con Borrell, el presidente Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, “se aseguraron el triunfo encarcelando a la oposición”.
“En Nicaragua la represión es más que preocupante, es inaceptable”, dijo Borrell en una conferencia de prensa en Luxemburgo, al fin de una reunión de los cancilleres de la UE.
Borrell dijo que la UE insiste en “democracia, derechos humanos, Estado de derecho, la liberación de los prisioneros políticos, el retorno de organizaciones internacionales de derechos humanos, y la realización de elecciones libres y justas”.
Siguen sanciones
El Consejo de la UE anunció la semana pasada la renovación, por un período de un año, del régimen de sanciones contra 14 funcionarios nicaragüenses, responsables por “abusos o violaciones de derechos humanos, o la represión a la sociedad civil”.
Entre los sancionados por la UE se encuentran el consejero económico de Ortega, Bayardo Arce Castaño; el presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Eduardo Porras Cortés; la presidenta de la Corte Suprema, Alba Luz Ramos Vanegas; la fiscal general Ana Julia Guido Ochoa y dos responsables de la policía.
También está sancionado el hijo del presidente Ortega, Juan Carlos, jefe del movimiento sandinista 4 de mayo y quien dirige Canal 8, una de las principales cadenas de televisión del país.