EscucharSi la temporada de jocotes nos alegra el paladar a más de uno, sean maduros, verdes o pintones, también es motivo de alegría un manjar frío que hacen en Pavas con esta sabrosa fruta.
Justo en Rohrmoser está la pastelería “Corazón Contento” que es un emprendimiento de Paulina Acuña, chef, y Humberto Ling, director de Investigación y Desarrollo. Ambos soñaron con un lugar diferente para que la gente disfrute de alimentos sanos y variados.
Estos emprendedores lo iniciaron justo antitos de iniciar la pandemia en el 2020, por eso les tocó un primer año bien rudo, pero no se arrugaron y siguieron echando pa’ lante hasta que lograron abrir en 2021.
Siempre se impusieron como objetivo lograr platillos únicos, especiales y muy diferentes para sorprender el paladar de sus clientes. Dentro de sus especialidades están los gelatos.
La diferencia con el helado es que el gelato, aunque parecen ser lo mismo a primera vista, no tiene tanta grasa, tienen menos aire y es más espeso, con lo cual se logra atrapar un sabor más fuerte en cada cucharada.
Sabrosera de jocote
Este gelato se hace con jocote maduro, se le exprime el jugo de limones mesinos, se le pone sal y se le ralla jocote verde.
“Usamos el jocote clásico, el tronador. Para el gelato se usan solo jocotes maduros pelados. Después de ver el gusto de las personas nos decidimos por el maduro a pesar de que hay mucha gente a la que le encanta el jocote verde.
“A la hora de tomar la decisión también nos preguntamos ‘¿qué pasa si mezclamos maduro y verde?’ Eso nos llevó a una profunda investigación y pruebas, hasta que le llegamos al sabor y la textura adecuada”, reconoció Humberto, quien agregó que todo el proceso inicial del jocote es hecho a mano, se pela jocote por jocote.
-¿Cómo nació el gelato de jocote?
“Siempre con la mentalidad de experimentar, al llegar la temporada de jocotes consideramos que era importante hacer pruebas para ver si lográbamos un gelato que gustara y sí lo logramos. Cada temporada de jocotes tenemos este producto.
“Como estamos siempre dentro de un proceso de mejora continua, cada temporada avanzamos y consolidamos el gelato de jocote, eso sí, cuando está la temporada de jocotes es nuestro producto estrella, es el que más pide la gente, les encanta”, responde Paulina.
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Nos explican que el pegue de esta sabrosera de jocote, el cual probamos y quedamos como locos, ha sido total porque le gusta da los chiquiticos de la casa y también a los jóvenes y adultos. Llegan familias completas a comerlos.
Provecho a lo local
La chef reconoce que lo de ellos es analizar bien lo que está a su alrededor y aprovechar las frutas propias del país, lo que significa sacarle el máximo jugo a lo que están en temporada.
“Constantemente tenemos un proceso de investigación en el cual estamos visitando mercados, las ferias del agricultor, hablando con productores para identificar la fruta de temporada y a partir de ahí hacemos un montón de pruebas de textura, de técnicas, de sabores y lo que más nos gusta, lo que mejor vemos que funciona, es lo que vamos sacando al mercado”, explica Humberto
“El primer gran análisis que hicimos para un gelato muy local fue con el coco, de hecho, es uno de nuestros gelatos más populares. Es pura leche de coco, nosotros aquí todas las semanas partimos los cocos y hacemos nuestra propia leche. Es superfreso y fue con el primero que experimentamos”, recordó Paulina.
Lo que más buscan con su emprendimiento es lograr un buen sabor en cada producto, en cada gelato, pero sobre todo que las personas vivan una experiencia total y alegre que atrape el paladar y la mente, que cada bocado sea una celebración. Créanos que así es, los gelatos que ellos hacen son superdeliciosos.
Un buen ejemplo de ese objetivo de atrapar paladar y mente es con el gelato de papa o de hongos que han tenido y que gustaron mucho. Uno, generalmente, no se imagina un helado de papa, pero ellos lo lograron y con buen sabor y textura, con papas de Cartago.
Siempre con la meta de experimentar con las frutas de temporada, ya experimentaron con el gelato de banano y de mango. Este último era a base de mango maduro, servido con una pelotita de un sorbete de mango sele, eso significa un contraste de lo dulce y salado muy especial.
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En Corazón Contento usted encuentra un gelato de leche de cabra, el cual también tiene aceite de oliva verde, queso de leche de cabra rallado y bien sabroso, además, uno de ayote-naranja, el cual mezcla la naranja con semillas de ayote caramelizadas. También hay otro de caramelo de zapote.
Están haciendo pruebas para uno de mandarina, pero todavía no lo tienen en el punto de sabor y textura que a ellos les gusta, pero ya casi. De la misma forma, están experimentado con el tamarindo, es la fruta con la cual querían trabajar hace tiempo.
