Isabel Lucía, la primera bebé que nació gracias a un tratamiento de fecundación in vitro en en Costa Rica, cumplió el 18 de abril un año de alegrar la vida de sus papás.

Keilyn Molina, mamá de la pequeña, dice que está muy agradecida con Dios, con las parejas que lucharon años atrás para que fue realidad el tratamiento de reproducción asistida en el país y también con todos los funcionarios que la ayudaron a ella y a su esposo, Enrique, a cumplir el sueño que tenían de ser papás.

“Es una bendición ver cómo nos ha cambiado la vida, ver a esa chiquitica tan simpática y tan risueña... de verdad que no hay palabras que puedan expresar la gratitud que nosotros tenemos”, expresó emocionada.

Este miércoles la Caja hizo una conferencia para contar cómo ha sido el proceso desde que empezó a trabajar la Unidad de Medicina Reproductiva de Alta Complejidad.

El doctor Jerchell Barrantes, coordinador de dicha unidad, dijo que en este tiempo han logrado 84 embarazos por medio de la técnica, y estos permitieron el nacimiento ya de 33 bebés que ahora iluminan la vida de los papás que tanto lucharon por ellos.

Otros 33 pequeños vienen en camino, por lo que están en proceso de evolución y seguimiento por parte de las autoridades de salud y lamentablemente 18 embarazos no llegaron a término.

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Dos oportunidades

Barrantes dijo que todas las parejas tienen dos oportunidades para hacer la fecundación. En caso de que una pareja logre el embarazo y este no llegue a término puede intentarlo una vez más, la nueva fecundación puede hacerse dos, cuatro o seis meses después del aborto, según estimen los especialistas que es más conveniente.

Si por algún motivo el segundo embarazo también termina en un aborto a la pareja se le da atención sicológica para puedan sobrellevar la situación.

El médico explicó que por un motivo de seguridad, cuando se hace el procedimiento y se fecundan varios óvulos, a la mamá se le implantan máximo dos embriones para proteger su salud y la de los bebés, por eso han tenido varios embarazos de gemelitos.

Los demás embriones son congelados para que si en un futuro las parejas quieren intentar un nuevo embarazo puedan usarlos o si no son donados al Estado, nunca son usados para experimentos ni desechados.

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Donadores de vida

El especialista contó muy motivado que en junio próximo se realizará un nuevo procedimiento para hacer fecundaciones in vitro en un grupo de parejas y por primera vez en uno de los casos se usará un óvulo donado.

El médico aprovechó la oportunidad para motivar a la población a donar vida por medio de óvulos o espermatozoides. Las personas interesadas deben tener entre 18 y 35 años y deben llamar al teléfono 2547-1400 para anotarse en el proceso.

La donación puede hacerse anónima o también con personas conocidas que quieran ayudar a una pareja que por alguna razón médica no pueda producir células óptimas para llevar a cabo el procedimiento.