Políticos como el expresidente Luis Guillermo Solís, Rolando Araya o el exministro de Comunicación Mauricio Herrera compartieron en redes sociales su dolor por la muerte de Mariano Figueres.

Como un hermano

Rolando Araya: “Ha partido Mariano y me deja un hondo y doloroso vacío. Vivió como quiso, rebelde y valeroso como su padre. Su partida me duele en el alma. Compartimos sueños y trincheras. Y en las luchas nos vimos como hermanos. Nos abrazamos en las derrotas y brindamos juntos en las victorias.

“Su norte fueron las mismas estrellas que miraba don Pepe. Convirtió su vida en un culto a su memoria que procuró honrar en cada paso de su vida. Se nos fue Mariano. Me duele mucho. Nos duele a todos. Su recuerdo se mantendrá vivo en el corazón de todos los que lo amamos. Descansa Mariano. Cumpliste tu misión”.

Pasión y entrega

Luis Guillermo Solís: "Mariano Figueres ha partido. Su intensa vida terrenal ha concluido, y ahora se inicia otra en un lugar en donde ya no hay tristeza ni dolor. Mariano fue mi otro hermano, mi yunta en las horas luminosas y en los momentos más difíciles. Sirvió como vivió: con pasión y entrega, comprometido con las mejores causas en favor de Costa Rica. Nos quedan su ejemplo y su pensamiento, su risa y su sincera amistad para todos a quienes amó.

“Se nos escapó Mariano el día del cumpleaños de don Pepe. No hay coincidencia en ello. Ahora están juntos para dar -desde allá- otras Luchas. Para todas y todos quienes quisieron a Mariano: su familia inmediata y su inmensa familia ampliada por el afecto y la amistad, mi respetuosa solidaridad y cariño. Y para vos, hermano querido, guerrero incansable: ¡paz!”.

Cargado de humor

Mauricio Herrera, ministro de comunicación en el mandato de Luis Guillermo Solís: "Muy dolido por la muerte de mi querido amigo y compañero Mariano Figueres. Nos queda su ejemplo de trabajo sin fin, honestidad, patriotismo, lealtad y buen humor, sobre todo buen humor. Hiperactivo, muy inteligente, solidario, honesto, puntual, madrugador y muy divertido.

“Era muy serio con sus responsabilidades, exigente, comprometido, meticuloso y diligente, pero siempre, incluso en los momentos más estresantes de las tareas de gobierno, era capaz de romper la tensión con una broma que hacía brillar las sonrisas”.

“Gran parte de los buenos resultados de la lucha contra el narcotráfico y la disminución de la conflictividad social en la administración Solís se debió directamente al trabajo de Mariano. Su experiencia también estuvo en las decisiones para evacuar a tiempo y salvar la vida de miles de personas que iban a ser afectadas por el huracán Otto, en la atención humanitaria a millares de migrantes y en la reconstrucción de puentes y caminos en la zona norte”.