OPINIÓN: ¿Y el país del pura vida qué se nos hizo?

Bloqueos saturados de terroristas, de vándalos armados con bombas molotov, miguelitos, piedras, pistolas, palos. No respetan a nada ni a nadie.

El bombero Marlon Ramírez, todo un héroe que salvó a una familia durante los estragos del huracán Otto, en noviembre del 2016, hoy está traumatizado porque vio la muerte de cerquita cuando un grupo de maleantes lo hizo bajado del carro de bomberos cuando iba a una emergencia. Estos cobardes se envalentonan cuando están en grupos.

El respeto por la autoridad, por los cuerpos de socorro, por la vida, por mujeres embarazadas, por recién nacidos, todos nuestros valores están quedando botados en la calle.

Hace rato que se nos va apagando el pura vida, solo el ICT trata de vender ese cuento a los turistas extranjeros. Ese término que se enquistó en nuestra alma para saludar, para decir que todo está bien, que nos sentimos orgullosos de ser ticos, va muriendo.

Vamos matando aquél país de paz creado por nuestros abuelos. Después de la revolución de 1948, José Figueres Ferrer eliminó el ejército, y desde entonces empezamos a rajar ante el mundo que nuestros soldados son los escolares y colegiales.

La plata que se iban a comer los militares se invirtió en educación, salud. Hoy con el desarrollo de las redes sociales somos vergüenza ante el mundo, de aquél país que salían imágenes de pajaritos lo que hoy salen volando son bombas caseras.

Repudiemos a esos que se hacen llamar líderes y que deberían estar enzepolados en la casa, rechacemos a esos que pudieron hacer algo por el país en sus años jóvenes y no hicieron nada, ahora antes de irse de este mundo quieren dejar todo en llamas.