EscucharUn tumor de 3,3 kilos le fue removido del cuello a un paciente de 33 años quien, afortunadamente, se encuentra bien de salud, aseguran las autoridades del centro médico.
La masa creció lentamente durante 25 años, tiempo que tenía el paciente de tenerla sin que le molestara más de la cuenta. Hasta que empezó a sangrarle y llegó a emergencias del hospital y comenzó el proceso que concluyó con la cirugía.
La operación se llevó a cabo en el hospital Calderón Guardia, en setiembre anterior, y la doctora Wendy Monge Aguilar, especialista en Otorrinolaringología, fue una de las que participó en el procedimiento. También hubo profesionales de neurocirugía, cirugía de cabeza y cuello, anestesiología y cirugía reconstructiva.
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El tumor estaba compuesto de tejido blando, quistes y vasos sanguíneos que lo irrigaban y lo están estudiando para ver su tipo y qué lo originó.
El procedimiento es una cervicotomía exploradora más resección tumoral y fue hecho en dos partes.
“Primero se tuvo que embolizar la masa; este procedimiento consiste en colocar un líquido especial para evitar el flujo sanguíneo a la parte que se debe retirar, pues debido a que por su tamaño contaba con vasos sanguíneos propios que la alimentaban, el procedimiento evita el exceso de sangre durante la cirugía”, explicó la doctora Monge.
Esta masa, según la experta, se nutría de la arteria maxiliar rama de la carótida externa por lo que los especialistas en neurocirugía realizaron la embolización y ocho días después se realizó la cervicotomía exploratoria. Esta consiste en la realización del estudio de una masa cervical, aunque fuera estudiada previamente con diversos exámenes realizados como, por ejemplo, exámenes bioquímicos, radiológicos, endoscópicos, citológico, entre otros.
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Los cirujanos reconstructivos cerraron el cuello y reconstruyeron la oreja que había sufrido deformidad por el peso de la masa.
La doctora Monge comentó que este es el primer caso de retiro de una masa de este tamaño que se realiza en el hospital. Agregó que no existe un registro a nivel nacional de este tipo de casos, debido a que son poco comunes.
El paciente quiso dar a conocer su caso de manera anónima para ayudar a otras personas. Comentó que la masa creció de manera muy lenta por un largo período hasta llegar al tamaño en que se le retiró, pero por su ubicación nunca le molestó para realizar su vida de manera normal, hasta que en fechas recientes creció de manera significativa y decidió retirarla.
Autoridades del hospital aprovecharon la oportunidad para hacer un llamado a la población y recordar la importancia de realizarse chequeos médicos al menos una vez al año y, en caso de presentar algún tipo de abultamiento o “pelotita”, consultar con su médico quien lo orientará para que esto no afecte su salud.
