Escuchar
Este sábado la comunidad china radicada en Costa Rica y los ticos festejaron el Año Nuevo chino, que este año está dedicado al perro de tierra.
Con la presentación de la Banda Municipal de San José y el grupo Compañía de Expresiones Culturales Costarricense dio inicio a la celebración en el barrio Chino, ubicado en el paseo de Los Estudiantes, en San José.
Un total de 25 actos culturales a cargo de distintos grupos asiáticos y costarricenses de todo el país, se presentaron en la tarima ubicada al costado oeste de la iglesia de La Soledad.
Este sábado ya es el segundo día del año, pero se aprovechó el fin de semana para que más personas pudieran darse cita.
La presidenta de la Asociación Colonia China, Isabel Yung, recordó que este es un año de prosperidad, armonía y paz. y aseguró que desde hace 163 años, que llegó el primer chino a nuestro país, ambos países han convivido adoptando parte de la cultura del otro.
“El año del perro es una oportunidad para iniciar nuevos proyectos y buscar el bien común de nuestra comunidad y nuestras familias. El perro es lo más cercano a lo humano, es honesto optimista y genera confianza, esa confianza que buscamos con el nuevo gobierno”, comentó Yung.
Suerte atrae a los ticos
Por su parte, Lai Sai Acón, directora del Instituto Confucio de la Universidad de Costa Rica, contó que gran parte de los asistentes les pedían de regalo los nudos de la suerte, símbolos importantes para la cultura china porque simbolizan la continuidad y la suerte.
"Este tipo de decoración se coloca generalmente en las paredes, pero muchos nos la pedían como llaveros para andar siempre con ellos o en la cartera", explicó Acón.
Otro de los elementos que estuvieron regalando los miembros del instituto fueron figuras en papel cortado, principalmente rojo, que se pegan a las ventanas también para atraer prosperidad con figuras como el pescado, que se liga a la abundancia por la semejanza en sonido de la palabra, en mandarín.
Este año se cumplen 11 años de las relaciones entre Costa Rica y la China popular, recordó el embajador de ese país, Tang Heng.
