Acción de mamá evitó que bebito resultara herido de gravedad en vuelco de ambulancia

Al darse cuenta que la ambulancia en la que viajaba junto a su bebé de 3 meses había perdido el control, Julissa Herrera reaccionó de forma inmediata y con todas sus fuerzas agarró la silla de seguridad en la que iba el chiquito.

Esa acción prácticamente le salvó la vida al pequeño Andrey Mateo, pues su mamá evitó que este sufriera golpes de gravedad en el vuelco de la ambulancia del comité de Cruz Roja de Guápiles.

“Gracias a Dios a mi bebé no le pasó nada, porque la reacción que tuve fue agarrar la sillita de él y protegerlo todo lo que pudiera, solo sé que tuvo un rasponcito en su cabeza y que lo llevaron al Hospital Nacional de Niños para hacerle un TAC para descartar cualquier lesión, porque él tiene hidrocefalia y una valvulita”, contó Julissa a La Teja.

LEA MÁS: Bebé de 3 meses resulta herido en vuelco de ambulancia

El incidente ocurrió a las 8:40 de la mañana de este lunes 12 de setiembre, específicamente después del puente sobre el río Toro Amarillo en dirección hacia San José, frente a repuestos Rodríguez.

“Gracias a Dios estamos vivos, porque a lo que vi la camilla se arrugó un poco, los vidrios se quebraron, por dentro era un desastre”.

—  Julissa Herrera, mamá del bebé

“Mi bebé tenía una cita en el Hospital Nacional de Niños, entonces nosotros nos dirigíamos (desde el hospital de Guápiles) hacia allá, pero de pronto como que sentimos un tirón y empezamos a rodar, y como ven en las fotos, allá fuimos a parar”, contó la joven madre.

Producto del accidente, el pequeño Andrey Mateo fue llevado de emergencia al hospital de Guápiles y de ahí fue pasado al Hospital Nacional de Niños, donde de momento se encuentra fuera de peligro.

Su mamá, el conductor de la ambulancia y un asistente médico que también viajaban con ellos, fueron llevados al hospital de Guápiles, pues sufrieron golpes de consideración.

LEA MÁS: Un hombre falleció tras caer con su carro a guindo

“Lo que tengo son golpes en las piernas, también me dolían mucho las muñecas, también en la zona pélvica tengo dolor, todo eso porque el cinturón me apretó mucho”, añadió Herrera.

Para la joven mamá lo que ocurrió la mañana de este lunes fue un milagro, porque perfectamente cualquiera de los que viajaban pudieron haber perdido la vida, especialmente su bebé.

“Quiero agradecerles mucho por la preocupación por mi hijo y los buenos deseos que nos enviaron”, mencionó Julissa.