Dos hombres apellidados Chavarría Rodríguez y Solís Cerdas fueron condenados a 129 años de cárcel por haber matado a Bernal Barrantes, de 53 años, y su hijo Jorjanny Barrantes, de 25, para robarles una carga de droga.
La sentencia fue dictada este jueves 21 de octubre por el Tribunal Penal Desamparados, cuyos jueces encontraron culpables a los acusados por el doble homicidio, ocurrido en agosto del 2018.
En específico, Chavarría fue condenado a 63 años de cárcel por dos delitos de homicidio calificado y uno de robo agravado; a Solís le recetaron 66 años por los delitos de homicidio, tráfico de drogas y tenencia ilegal de arma.
“Sin embargo, el Tribunal Penal readecuó la sentencia a la pena máxima costarricense, por lo que la condena que cumplirá cada uno de ellos es de 50 años de prisión”, informó la Fiscalía.
Pocos días antes del 22 de agosto del 2018, Chavarría y Solís idearon un plan para robarse un aparente cargamento de sustancias ilegales que le pertenecía a Barrantes.
“Se sospecha que los imputados le hicieron creer a Bernal Barrantes que Chavarría le ayudaría a hacer un negocio, por lo que este sospechoso viajó hasta la vivienda del ofendido, en Paso Canoas, y los escoltó (a padre y a hijo) hasta San José, donde, posteriormente, los llevaron hasta Cañada del Sur, en San Sebastián”, explicó la Fiscalía.
Una vez en Cañada Sur, Chavarría y Solís se apoderaron de la carga de Barrantes, de pertenencias y de las de su hijo, luego los obligaron a entrar a la cajuela de un carro y los llevaron hasta San Cristóbal de Desamparados, donde los asesinaron a balazos.