Exdiputado Víctor Hugo Víquez: tras de cuernos, palos

El refrán "tras de cuernos, palos" resume lo que le pasó este jueves al exdiputado del Partido Liberación Nacional Víctor Hugo Víquez.

Investigadores de la Sección de Fraudes y Anticorrupción del OIJ sorprendieron a Víquez al llegar a su casa en Santa Inés de San Jorge de Heredia, a las 8 a.m.

A esa hora el exlegislador aún estaba en pijamas, incluso esperaba el desayuno que le debía preparar su empleada doméstica Débora Robleto; sin embargo, los agentes ni siquiera dejaron que la mujer entrara a la vivienda.

Los investigadores buscaban evidencias sobre el supuesto tráfico de influencias que pudo haber cometido Víquez a favor del empresario del cemento chino Juan Carlos Bolaños, dueño de Sinocem Costa Rica. En esa labor, los agentes descubrieron otro supuesto delito en contra del exdiputado: la tenencia ilegal de piezas precolombinas.

A las 10:30 a.m. los oficiales sacaron de la casa cinco piezas precolombinas de piedra y de cerámica que fueron llevadas al Museo Nacional, donde informaron que son auténticas.

Emilia Navas, fiscala general de la República, dijo que ya abrieron otra investigación para determinar si se cometió o no este delito de tenencia de piezas.

Los allanamientos de este jueves incluyeron la casa en Limón del exdiputado Wálter Céspedes, del PUSC, y las instalaciones de la Comisión Nacional de Emergencias, en Pavas. Víquez y Céspedes habrían intercedido a favor de Bolaños en la CNE para que se le atribuyera la construcción de obras públicas.

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Adiós a la candidatura

El jueves 26 de octubre Víquez renunció a su candidatura para ser de nuevo diputado del PLN por Heredia. Lo hizo luego de que el candidato presidencial Antonio Álvarez Desanti le pidiera que abandonara ese puesto debido al escándalo del cementazo.

La renuncia se debió a una supuesta irregularidad de tráfico de influencias que había denunciado la Auditoría Interna de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) contra Víquez en el 2013.

Lo señalaban de, supuestamente, haber enviado mensajes a la presidenta ejecutiva de la CNE de ese entonces, Vanessa Rosales, para que beneficiara a Juan Carlos Bolaños, quien aspiraba a ganar un contrato para encargarse de la estabilización de taludes en el camino entre Ciudad Colón y El Rodeo de Mora.

Escándalo por video

Y estos no son los únicos escándalos en los que se le ha visto involucrado el liberacionista. En el 2012 se vio enredado en un alboroto que trascendió nuestras fronteras y tuvo que ver con un vídeo sensual que grabó su entonces esposa Karina Bolaños.

Bolaños había grabado el video en Ciudad del Cabo, Sudáfrica. Salía con ropa íntima y jugando con almohadas y le dedicaba la grabación a otro hombre al que llamó "Pequis”.

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Esta polémica grabación la dio a conocer un nicaragüense, experto en cámaras de seguridad, con el que Karina tuvo una relación posterior a su aventura con “Pequis” y la información la dio a conocer La Teja en el 2012, esta situación provocó el divorcio y la separación de Karina del cargo de viceministra de Juventud.

"En la batalla del amor perdí"

Víquez se llevó otro golpe en ese mismo año, cuando Karina Bolaños dio una entrevista en la famosa revista española Interviú y volvió a poner el tema en boca de todos. La nota fue un ‘boom’ internacional.

“Yo soy un hombre de luchas. (...) He sabido perder y ganar y yo quiero que ustedes entiendan que, diay, en la batalla del amor perdí”, dijo Víquez el 8 de agosto del 2012 cuando el escándalo estaba en lo más y mejor.

Tiempo después, en el 2016, confesó en una entrevista concedida a La Teja que aquella aparición de Karina en Interviú lo había terminado de golpear.

“Eso me puso peor porque jamás esperé una cosa de esas de parte de ella...Eso a uno como adulto lo marca para toda la vida”.

La CNE y Céspedes también

Los investigadores, además de allanar la casa de Víquez, registraron las oficinas de la CNE en Pavas y la casa del exdiputado Wálter Céspedes Salazar en Batán, Limón.

El Ministerio Público dijo que los ahora exdiputados se valieron del puesto para intervenir a favor de Juan Carlos Bolaños y de sus empresas, Sinocem Costa Rica S.A. y Alquiler de Maquinaria S.A., para obtener beneficios y licitaciones como la carretera Bribrí-Sixaola, el camino Ciudad Colón-El Rodeo de Mora y obras públicas en la comunidad de Nosara, en Guanacaste, donde se construyó un dique.