Maestra es sospechosa del delito de apoyo y servicios para el terrorismo

El Ministerio de Educación Pública está a la espera de que termine la investigación contra la maestra de apellidos Fernández Castro, sospechosa de mandar audios en los que llamaba a atentar contra la vida del presidente de la República y poner bombas en medios de comunicación.

Ante una posible acusación por parte del Ministerio Público, la educadora sería despedida de su cargo.

Fernández fue detenida este martes por el OIJ en las afueras de su casa –en Sabanilla de Montes de Oca– por los audios que se difundieron por WhatsApp el 28 de julio. Al parecer, fue ella quien grabó los audios.

Nelly Venegas, jefa del Departamento de Gestión Disciplinaria del MEP, indicó por medio de la oficina de prensa del MEP, que al enterarse de la detención de Fernández Castro se puso en contacto con la Fiscalía.

“Es importante hacer mención que, de acreditarse los hechos denunciados, se incurriría en un incumplimiento a los deberes del cargo, en este caso pérdida de idoneidad y confianza, por lo que podría acarrear responsabilidad disciplinaria, que incluso conllevaría la separación del puesto”, dijo Venegas.

En este momento la maestra tiene dos investigaciones encima: la del Ministerio Público y la administrativa por parte del MEP.

A esta maestra ya la habían despedido del ministerio en el 2010 por una gran cantidad de ausencias injustificadas, pero la Sala Constitucional ordenó reinstalarla en el puesto.

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El director del OIJ, Walter Espinoza, aseguró que investigan si existe algún vinculo entre la maestra y los otros detenidos este martes por colocar explosivos.

La detención de Fernández se dio sin incidentes; ella es sospechosa del delito de apoyo y servicios para el terrorismo, según el Ministerio Público.