Las llaves electrónicas del hotel La Mansión Inn en Manuel Antonio, Quepos, donde mataron a la doctora María Luisa Cedeño Quesada, también fueron parte de las pruebas para la investigación por el homicidio.

La encargada de la investigación, Raquel Salazar, indicó en sus informes las horas en las que abrieron las habitaciones.

Afirmó que la habitación 7, donde estaba hospedado el administrador de empresas costarricense de apellidos Miranda Izquierdo, fue abierta en siete ocasiones durante la madrugada del 20 de julio del 2020.

Estas aperturas el 20 de julio del 2020 fueron --de acuerdo con el historial de las llaves-- a las 00:52 a. m., 00:53 y 00:54 (en estos minutos la llave no fue girada, significa que insertaron la llave y no giraron el llavín para abrirla), luego a las 00:57, 00:59 y la 1:14 a. m. (manilla no girada) y 1:19 a. m.

Luego de estas siete aperturas, hubo otra a las 7:51 a. m. (manilla no girada) y a las 7:53 a. m., 10:49 a. m., 12:07 p. m. A la 13:00 hay otra apertura que la realiza Lester Jiménez (exempleado de mantenimiento) con la llave maestra que él tenía y por solicitud de Bodaan, que lo mandó a buscar.

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La llave asignada al bailarín nicaragüense Herrera Martínez, registró que entró a su habitación, la número 21, a las 2:06 a. m.

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El último ingreso

La última vez que María Luisa Cedeño Quesada entró a la habitación 3 fue a las 6:42 p. m. del domingo 19 de julio del 2020.

Así lo señala la llave electrónica que le asignaron a la doctora y que tenía sus datos como huésped de ese cuarto.

Este detalle lo señaló Raquel Salazar, la agente del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Quepos que estuvo a cargo de esta investigación.

“Fue coincidente con los testimonios de las huéspedes de la habitación 10 (Karla Retana y Ariel Susanna Rojas ) y la recepcionista, que indicaban que durante la noche del domingo 19 de julio del 2020 la doctora bajó a la recepción a la espera de un servicio exprés (comida) que había pedido”, señaló Salazar.

La llave electrónica que le asignaron a María Luisa Cedeño nunca más volvió a abrir la habitación.

Sin embargo, las autoridades tienen claro que a las 9 de la noche del domingo 19 de julio del 2020 la médica seguía con vida, porque lo verificaron con las conversaciones por WhatsApp que ella tuvo con sus amigas.

Luego de haber hallado el cadáver de la doctora Cedeño, el 20 de julio, las autoridades judiciales nunca encontraron ningún tipo de alimentación, ni recipientes o cubiertos que la doctora llevó esa noche hasta su habitación.

Los investigadores señalan que la escena del crimen fue alterada y lo supieron desde que encontraron el cuerpo de la doctora desnudo y lavado, por lo que hubo elementos que tampoco encontraron al ser alterado el sitio.

María Luisa Cedeño llegó al hotel el sábado 18 de julio del 2020, la hallaron sin vida el lunes 20 de julio del 2020 al mediodía en medio de sangre y desorden en su cuarto.

Llamada al 911

Más de nueve minutos duró la llamada por parte de los empleados del hotel La Mansión Inn al 911 para informar la preocupación sobre la sangre en la habitación de la doctora María Luisa Cedeño Quesada.

Raquel Navarro, exsupervisora del restaurante del hotel, fue quien llamó y se le escuchaba la voz nerviosa para informar que la huésped no respondía.

Seguidamente, Lester Jiménez, exempleado de mantenimiento del hotel, también le dice al operador que María Luisa Cedeño está sin vida.

El operador les insistía que revisaran si la víctima respiraba; sin embargo, Lester señala que Bodaan no lo dejó entrar por segunda vez al cuarto.

Incluso, dentro de la conversación hubo fricciones entre el operador y Raquel, pues le señalaba que llevaba ocho minutos en una línea de emergencia y aún no le indicaban si la víctima respiraba; Raquel le trataba de explicar que ella estaba en recepción y no en la habitación (no están a la par) y que otros compañeros andaban verificando.

Luego el operador le dice que ya estaban enviando una ambulancia al hotel.