Miguel Vega Rojas, el saxofonista de la banda nacional Sonámbulo Psicotropical que murió en un accidente de tránsito, se hizo muy conocido por su gran talento y enorme corazón.
El músico, de 32 años, falleció este domingo a eso de las 4:16 a.m., luego de que el carro que iba manejando se saliera de la calle y chocara de frente contra un poste en San Antonio de Coronado, 50 metros al oeste de la iglesia de católica.
Vega, quien era vecino de Patalillo de Coronado, estaba casado desde el 2010 y era padre de dos chiquitas de 8 y 2 añitos.
Las reacciones por la trágica muerte del saxofonista no se hicieron esperar y su muro de Facebook se llenó de mensajes de despedida de sus seres queridos.
El grupo Sonámbulo Psicotropical también usó sus redes sociales para dedicarle un mensaje a Migue, como le decían de cariño.
“¡Una luz enorme en el universo brilla hoy! Buen camino Migue, el cariño y el amor por la música y la vida serán siempre inspiración para todos. ¡Te amamos hasta el infinito!”
Lo mismo hizo la banda nacional Cocofunka, de la cual Vega también formó parte.
“Hoy partió un ángel de vuelta al cielo, un hermano, una de las personas más talentosas y amorosas que hemos conocido. Descansa en paz Migue, te vamos a extrañar todos los días”.
Entre quienes lamentaron la muerte de Vega también estaba el DJ costarricense Lawrence Casal, quien describió a Miguel como un músico cuyo talento solo era superado por su calidad como ser humano.
“Era un gran amigo y una persona solidaria, siempre muy atento a trabajar y hacer las cosas de la mejor forma. Procuraba estar siempre lejos de cualquier tipo de problema y era muy dado a su familia y amigos”, dijo.
Casal aseguró que el saxofonista tenía un corazón enorme y siempre vio la música como instrumento para ayudar a otras personas.
Además de estar en la banda Sonámbulo Psicotropical, en la cual tocaba junto a su hermano, Vega también era baterista de la banca católica Infiltrados y formaba parte del grupo Cico Contravía.