Niño atropellado por bus anhela chancletas y una mudada para cuando salga del hospital

El pequeño Kimany Joseph Huete Pérez, de 12 años, está internado en el Hospital del Trauma, donde los doctores le hacen injertos en la piernita izquierda después de que fue atropellado por un bus en Batán de Limón.

Su mamá, doña María del Carmen Pérez Pérez, nos contó que el accidente ocurrió el pasado 22 de abril, a las 11:30 de la mañana, frente a la estación del tren, en el centro de Batán, de donde ellos son vecinos.

Kimany es uno de esos pequeñitos que pasa pateando bola todo el día, le encanta mejenguear aunque ahora por la pandemia casi no ha podido volver a jugar con sus amiguitos.

El día del accidente le pidió permiso a su mamá para ir a jugar con sus amiguitos, cuando iba de regreso, en una bici prestada, para su casa ubicada detrás de El Colono, pasó el accidente, estaba cerquita de llegar.

“Yo estaba en la casa sentada en la mecedora esperando a que llegara, pero el que llegó fue un muchacho en carro para avisarme que un bus lo había atropellado. No le puedo explicar, yo me puse como loca, fue una desesperación, el muchacho me llevó en el carro hasta donde estaba mi hijo y me lo encontré tirado en la calle, fue un momento terrible”, dijo la mamá.

Ella nos explicó que lo que de momento saben sobre el accidente es que el bus le golpeó la manivela de la bici y eso hizo de Kimany perdiera el control se cayera y el bus con una llanta trasera le majó la piernita, eso provocó que se le arrancara la piel que tapa el músculo de la parte de atrás de la pierna.

La desesperada mamita asegura que su hijo es un milagro porque para lo terrible del accidente afortunadamente no sufrió otras fracturas, en el lugar del accidente muchas personas pensaron que la piernita iba a estar en riesgo.

Kimany fue llevado por una ambulancia de la Cruz Roja a la Clínica de Batán, después al Hospital de Limón, y ese día lo mandaron para el Hospital del Trauma porque el bus de estudiantes tenía póliza.

“Nosotros no nos separamos, hemos pasado todo este tiempo juntos, yo apenas tenía una ropa que tuve que empezar a reutilizar, pero unas excompañeras de trabajo me ayudaron con un dinerito para los pasajes y gracias a Dios puede ir a Batán el lunes 10 de mayo a traer otras cositas y devolverme, porque yo no tenía recursos para poder salir de aquí”, dijo la mamá, quien duerme en una silla para cuidar a su hijito.

Doña María asegura que los médicos han atendido con mucho cariño a su hijo, pero confiesa que los días son muy duros en el hospital, por tantas cosas que se ven y también por la situación que se vive con la pandemia.

“No sabemos cuánto tiempo más vamos a estar aquí, ya llevamos bastante, pero mi hijo, al principio tenía mucho dolor, ya se le ha ido pasando un poco, los doctores no nos han dicho cuánto tarda la recuperación, él se desespera porque quiere irse para la casa, está como loco porque le den la salida, pero entendemos que es un proceso”, dijo la mamá.

Pérez aseguró que con la pandemia la situación se les ha puesto muy dura, y las chancleticas que usaba su hijo para andar por todo lado se le dañaron cuando ocurrió el accidente y ahora necesita unas para salir del hospital.

“Mi hijo dice que quiere las chancletitas y yo no tengo cómo comprarselas ahorita porque tengo que estar con él, y una mudada para cuando llegue al pueblo, además, necesita una crema humectante de cualquier marca porque tiene la piel seca de tanto estar en cama”, contó la mamá.

Si usted quiere ayudar a este niño puede contactar a doña María del Carmen al 6396-5331

*Colaboró con esta información El Bataneño, Noticias y más.