Notificador judicial que murió en manos de delincuentes era muy pulseador junto con su esposa

Un hombre de familia, deportista, trabajador y pulseador es lo que define a Luis Gerardo Alfaro Molina, de 40 años, el notificador del Poder Judicial que murió en manos de unos delincuentes.

Gerardo, como la mayoría lo conocía, era padre de dos niños y en noviembre próximo cumpliría 10 años de matrimonio junto con la mamá de los pequeños.

En las redes sociales de ambos se expresaban el amor con frecuencia y así lo demostraban sus fotos tanto dentro como fuera del país.

El matrimonio era de emprendedores, pues ambos compartían la página Mathi Bakery (panadería) el nombre, al parecer, es la unión de los dos hijos del matrimonio.

Con frecuencia Gerardo compartía los pasteles que vendía junto con su esposa; incluso, la última publicación fue uno de estos.

Además tiene fotografías practicando ciclismo MTB. Él trabajaba desde el 2010 en el Poder Judicial, su trabajo es considerado uno de los más peligrosos, pues debía notificar a las personas requerías por la justicia, y aunque él no los iba arrestar, si les entregaba el documento para que se presentaran. Alfaro se movilizaba en motocicleta.

La última vez que fue visto con vida fue el jueves 7 de marzo anterior cuando andaba trabajando; al parecer, habría sido víctima de un bajonazo en INVU de Sarchí.

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Este mismo jueves por la tarde apareció abandonada la moto que él utilizaba para trabajar. A Alfaro lo buscaron hasta las 10 p.m., pero sin respuesta positiva.

El cuerpo del notificador judicial fue encontrado este viernes 8 de marzo por la mañana en un cafetal que comunica Sarchí con Grecia, a 50 metros de la carretera.

El cuerpo de don Luis tenía un balazo en la espalda y además golpes y marcas que se cree le provocaron cuando lo agredieron para quitarle la motocicleta.