Peón pidió moto prestada para comprar hamburguesa pero terminó cometiendo un crimen

Un electricista de apellido Varela y 21 años y un peón de construcción extranjero de apellido Berríos, de 29 años, son acusados de atentar contra la vida del mecánico Gilberto Bolaños López y de asesinar a Flor Mayela Angulo Rosales, vecina de los sospechosos.

Este viernes a las 9:05 a.m. comenzó el debate contra los sospechosos y uno de los testigos dijo que el día del suceso Berríos pidió una “scooter” prestada para ir a comprarse una hamburguesa pero terminó utilizando el vehículo para el ataque en el que murió Angulo, quien dejó huérfanos a dos niños menores de edad.

El testigo agregó que la moto no tenía papeles.

Una hermana de Angulo comentó que consideraban amistades a Varela y a Berrios y jamás imaginaron que fueran capaces de hacerles daño. Otro de los testigos mencionó que, en apariencia, los hombres se equivocaron de víctima.

De acuerdo con la acusación del fiscal Ronald Segura, el viernes 10 de noviembre del 2017, a las 9 p.m., el mecánico Gilberto Bolaños estaba en el bar Rincón del Pueblo, en La Unión, y allí se encontró con Flor Mayela y otra amiga. Estuvieron compartiendo un rato y luego decidieron ir a otro bar.

Pasadas las 2 a.m. del sábado Gilberto fue a dejar a Flor Mayela a su casa, cerca de los tanques en San Rafael de San Vicente de La Unión, en Cartago. Decidieron quedarse afuera de la casa conversando un rato dentro del carro y fue entonces que los hombres pasaron y les dispararon. Berríos era el que manejaba la moto y Varela, al parecer, fue el que disparó por orden de Berríos.

“...disparó de manera indiscriminada, impactó a la mujer y Gilberto Bolaños logró agacharse y tirarse hacia la derecha”, mencionó el representante del Ministerio Público en el juicio.

Los jueces Magaly Urube Rivera, Allan Pérez Arce y Ricardo Alvarado Calderón les preguntaron a los acusados si deseaban dar declaraciones y ellos optaron por callar.

La sentencia será dictada la semana que viene.