Wendy Núñez Rivera, profesora de religión de 31 años, es la sexta fallecida por el accidente ocurrido la tarde del domingo 10 de setiembre en Coyolar de Orotina, sobre la carretera San José-Caldera.
Núñez era la conductora y propietaria del Daihatsu Terios que fue chocado por un Honda Accord, en el que murieron cuatro de sus cinco ocupantes.
Juan Carlos Bolaños, cuñado de la educadora, explicó que Wendy murió este sábado y la familia acordó donar los órganos que puedan servir a otras personas.
Así lo había expresado en vida Wendy, cuyo funeral posiblemente se llevará a cabo este lunes en Santa Ana.
La profesora era soltera y sin hijos. Además de dar clases en la escuela Isabel La Católica, era catequista en la parroquia de Río Oro, Santa Ana.
El día del accidente Wendy regresaban de una actividad familiar en Pérez Zeledón junto a su mamá, una tía y un tío. El accidente de tránsito ocurrió cuando iban hacia la casa.
Esa es la colisión que más muertes ha dejado en lo que va de este año.
La otra víctima mortal de ese domingo fue un ocupante del Daihatsu Terios, identificado como Gilbert Umaña Rodríguez, de 77 años, y tío de la profesora de religión.
Mujeres siguen delicadas
Otras dos mujeres que iban en este carro siguen delicadas. Se trata de María Elena Rivera Umaña, de 58 años, madre de la docente y María Eugenia Umaña Umaña, tía de la profesora, quienes están internadas en Cuidados Intensivos del Hospital México y el San Juan de Dios, respectivamente.
Las fallecidos del Honda fueron Marco Peraza Molina, de 21 años, conductor del vehículo, así como su madre Norma Cristina Molina, de 39, y otro hijo de ella, de 7 años. También falleció Jason Mora, amigo de la familia, de 23 años.
La única sobreviviente de ese carro fue Angélica Campos Méndez, de 18 años, novia de Marco Pereza. Ella sigue hospitalizada.