EscucharUn hombre de apellidos Gutiérrez Alfaro, de 32 años, catalogado por las autoridades judiciales como un asesino en serie, enfrentará un juicio en Limón acusado de haber matado y descuartizado a Wálter Nelson Antay Rodríguez, de 52 años.
Antay era un peruano nacionalizado costarricense y tenía una soda en Limón, sus restos aparecieron en ocho bolsas en un congelador en barrio Los Cocos, en la provincia caribeña.
Gutiérrez será juzgado junto a dos mujeres de apellidos Alfaro y González, así como otro hombre apellidado Baltodano.
El debate se llevará a cabo del 10 al 12 de noviembre.
La última vez que se vio con vida a Antay fue en setiembre del 2018, sus restos fueron hallados el jueves 13 de diciembre del 2018.
Los imputados fueron detenidos en diciembre del 2018, luego de que las autoridades allanaron una soda y una casa en barrio Los Cocos, en Westfalia, que le pertenecían a la víctima mortal; así como una oficina en el centro de Limón.
Exesposa de peruano también fue asesinada
Gutiérrez también es sospechoso de matar a Rita Raquel Rostrán Fajardo, quien fue esposa de Antay y con quien tuvo un hijo.
El matrimonio se casó en Perú, vivió en Nicaragua junto a su hijo, luego se divorciaron y Antay se vino para Costa Rica en el 2008.
Gutiérrez habría conocido a la pareja en Nicaragua, cuando administraban una soda.
Seis años después de que Wálter llegó a Costa Rica, comenzó a recibir mensajes del número de su exesposa en los que le decía que no deseaba tener más contacto con él ni su hijo.
Por eso al menor se lo trajeron para suelo tico, para que viviera con su padre en Limón.
Gutiérrez Alfaro estaba a cargo de todos los negocios de Rita e incluso vendió la casa de la mujer en Nicaragua y se vino para Costa Rica a trabajar con Antay en el negocio de Limón. Después, el cuerpo de la mujer fue encontrado enterrado debajo de un piso de cemento, el OIJ no precisó cuándo fue el hallazgo.
Más tarde, en septiembre del 2018, Wálter dejó de ser visto por su hijo y por su actual pareja, pero ellos seguían recibiendo supuestos mensajes de él, en lo que decía que no quería estar con ellos dos. El mismo modo de operar con Rita.
Las autoridades ticas y nicaragüenses descubrieron así este doble homicidio. Incluso Wálter Espinoza, director del OIJ, catalogó al principal sospechoso como un asesino en serie.
